Cerámica de tercera calidad

La calidad de los materiales cerámicos se miden basándonos en los defectos que presentan, como cachados, fisuras, grumos, gotas, variación en la textura superficial, diferencias de tono, diferencias de medidas, etc... que aumentan su frecuencia de aparición y tamaño a medida que disminuye el nivel de calidad.

La principal ventaja de este tipo de productos es el bajo precio que tienen. Llegando al 50% o incluso más.

Para clasificar un defecto como de segunda calidad, debemos atender a diferentes posibles defectos de rotura (cachaduras), de superficie (pequeños pozos o protuberancias), de tono (placas con leve diferencia de tonalidad), de calibre (placas con diferencia de dimensión por encima de lo que las normas aceptan) y un largo etcétera. A veces estos defectos no son demasiados o son imperceptibles. Cabe tener en cuenta que mientras con un azulejo de tercera calidad los defectos oscilan entre un 15% y 25% del total de la superficie cuando hablamos de segunda calidad aparte de este porcentaje ser menos, los defectos también son menos perceptibles.

Es normal que los azulejos clasificados como segunda calidad no puedan instalarse  de forma completa, se deben cortar para eliminar el defecto y poder aprovechar el resto.

Disponemos de una amplia gama de productos cerámicos de segunda calidad. Debido a la alta rotación de existencias de este tipo de producto toda compra se realizará de forma telefónica, por lo que para realizar, consultas de disponibilidad de modelos, pedidos y stock diríjanse al número de teléfono 964 367 600.